El nuevo Range Rover es híbrido y alcanza los 400 CV

Fiel a los deseos de sus clientes de introducir, años tras año, pequeñas mejoras en sus vehículos, la marca británica Land Rover ha presentado recientemente un restyling para la cuarta generación del Range Rover. Entre las principales novedades de la nueva gama Range Rover 2018 destaca la llegada de la primera versión híbrido enchufable del modelo, el Range Rover P400e.

Las mejoras estéticas consisten en una puesta al día de su diseño exterior, que puede apreciarse en los nuevos colores para la carrocería disponibles, el diseño de las llantas o las nuevas ópticas delanteras más estilizadas. Por su parte, los mejorados elementos interiores permiten mantener a los nuevos Range Rover como una referencia del mercado en el segmento de los SUV de lujo.

Con la gama Range Rover 2018 el confort está asegurado, empezando por sus nuevos asientos, que han sido rediseñados y cuentan con un nuevo sistema de acolchado, así como con diversos programas de masajes. Sus múltiples reglajes permiten seleccionar la posición más adecuada para cada tipo de carretera y tanto los reposabrazos como los reposapiés y los reposapiernas están calefactados.

El interior también cuenta con puntos de conexión para diferentes tomas que permiten una conectividad total, incluyendo puestos HDMI, USB y puntos de acceso Wi-Fi 4G. Otra de las novedades que acompaña a la nueva gama del Range Rover es el lanzamiento de una aplicación para smartphones con la que configurar los asientos, al gusto de cada usuario, de forma remota.

Las novedades tecnológicas también están presentes en la gama Range Rover 2018. Para garantizar el máximo confort de sus ocupantes, el sistema de ionización del aire del habitáculo usa nanopartículas cargadas con agua que limpian y purifican el aire. El parasol gestual se abre y se cierra de forma automática en función del movimiento de la mano. Los faros LED por píxeles-láser ofrecen una iluminación óptima apagando o encendiendo diferentes secciones, evitando además deslumbrar al resto de conductores.

En el habitáculo del Range Rover destacan dos pantallas táctiles de 10 pulgadas que aseguran la información y el entretenimiento esperado por los clientes que adquieren un SUV de lujo. Y como novedad, se incorpora la Activity Key ya vista en el Jaguar F-Pace, que permite bloquear y desbloquear el vehículo sin necesidad de la llave, un sistema que resulta ideal para dejar las llaves en casa cuando se sale a hacer deporte.

Las motorizaciones no cambian con respecto al modelo anterior, manteniéndose las versiones diésel y gasolina, pero aparece por primera vez una nueva versión híbrida enchufable para el Range Rover P400e. El sistema se compone de un motor de gasolina Ingenium 2.0 de cuatro cilindros y capaz de generar 300 CV, y un motor eléctrico de 116 CV. Como consecuencia, su potencia combinada supera los 400 CV y permite una autonomía máxima de 51 kilómetros en modo 100% eléctrico.

El sistema híbrido del Range Rover P400e cuenta también con un modo Save, que permite mantener el nivel de carga de la batería con tan solo pulsar un botón, con lo que se puede reservar la carga para lugares con restricciones al tráfico por contaminación, y con un modo Predictive Energy Optimisation (PEO), que optimiza el uso de ambos motores, en función del destino indicado en el navegador, para atender a diferentes datos como las restricciones al tráfico o las diferencias de altitud.

Capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 6,8 segundos y con una velocidad máxima de 200 km/h, el Range Rover P400e esconde la toma de corriente en su parte frontal, integrada en la parrilla delantera. La carga de las baterías de iones de litio de alto voltaje se completa en 7 horas y media en un enchufe normal, o en 2 horas y 45 minutos en un punto de recarga rápida.

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