10 carreteras de ensueño

Por ello, hemos decidido agrupar en este artículo 10 carreteras de ensueño que cualquier buen conductor debería disfrutar (o sufrir) una vez en la vida. 

1) Highway 1, Estados Unidos

Arrancamos con un clásico, la ruta de Big Sur que va de Los Ángeles a San Francisco. 700 kilómetros a través de de parajes naturales únicos y localidades genuinamente americanas. El road trip por excelencia de la Costa Oeste y un viaje obligado para los cinéfilos, con multitud de referencias por descubrir.

2) Carretera al Himalaya, Pakistán

En el Karakórum pakistaní, a los pies del Himalaya, encontramos una carretera tan bonita como mortal. Se cruzan puertos de más de 4.700 metros de altitud, y el camino está transitado por multitud de camiones y otros vehículos que hacen del trayecto uno de los más peligrosos del planeta. Una auténtica aventura sobre ruedas. 

3) Autopista Dalton, Estados Unidos

Regresamos a los Estados Unidos aunque subimos bastante más al norte… exactamente a Alaska, donde la Autopista Dalton es famosa por ser el único enlace entre la civilización y los pozos petrolíferos del mar helado de Alaska.

La Autopista Dalton tiene una longitud de más de 600 kilómetros que discurren a través de únicamente 3 pueblos, encontrando en su camino poco más que desolación y ventiscas. Esta carretera está recomendada únicamente para camiones durante la mayor parte del año debido al clima extremo. Es necesario viajar con suministros suficientes, pues el camino se puede convertir en una auténtica trampa.

4) Túnel de Guoliang, China

Guoliang es, probablemente, uno de los túneles más famosos del mundo. Con 1,2 km. de largo y 4 m. de ancho y localizado en los alrededores de Shanghai, pasar por el túnel exige gran paciencia y pericia al volante... ¡nunca un túnel había entrañado tantos problemas! 

5) Paso del Stelvio, Italia

Una de las rutas en coche por antonomasia de Europa. 48 curvas, 24 kilómetros de longitud y un desnivel medio del 7,6% son algunos de los datos que demuestran que el Paso del Stelvio, en Italia, es uno de los puertos de montaña más duros del mundo. Es muy común encontrar grandes colas de superdeportivos esperando a disfrutar de esta carretera, especialmente en época estival.

6) Carretera a los Yungas, Bolivia

Lo que podría parecer una ruta sudamericana más, es en realidad una de las carreteras con más peligro del mundo. En la actualidad hay un camino alternativo, pero los aventureros siguen queriendo experimentar la sensación de viajar al borde del abismo a más de 4.500 metros de altitud… con la selva a sus pies.

7) Pasaje de Gois, Francia

Las mareas siempre han sido un elemento a tener muy en cuenta en los países costeros, y Francia es el ejemplo perfecto de ello. El Pasaje de Gois, al norte del país galo, es una carretera de 4,3 kms bañada por la costa atlántica que desaparece con cada pleamar (dos veces al día). Por lo tanto, la ruta está siempre húmeda y resbaladiza y nunca se debe confiar en cruzar en el último momento… las consecuencias pueden ser complicadas.

8) Trollstigen, Noruega

“La escalera del Troll” es una conocida carretera de la zona de los fiordos noruegos. Esta singular ruta discurre a lo largo de once curvas de 180 grados y una inclinación media del 9% construidas en la ladera de la montaña. Una auténtica escalera delante de nuestros ojos que cada año cruzan miles de turistas. Además, está a pocos kilómetros de otra ruta singular, la Carretera del Atlántico.

9) Tianmen, China

Regresamos al país oriental para descubrir la fantástica Montaña Tianmen, una curiosa construcción que podríamos denominar un parque de atracciones para conductores. 99 curvas a lo largo de 11 kilómetros permiten llegar rápidamente a los 1.300 metros de altitud… aunque con un buen mareo por el camino.

10) Col de Turini, Francia

Siempre decimos que “la cabra tira al monte”, y esta expresión es perfectamente válida para la ruta que cierra nuestro artículo de carreteras de ensueño. Se trata de la mítica subida al Col de Turini, en los Alpes Marítimos. Una de las carreteras más conocidas del mundo gracias a ser punto determinante de cada edición del Rallye Monte-Carlo. Tras una sucesión eterna de curvas enlazadas, el Col de Turini culmina el ascenso a los 1.600 metros de altitud con un gran paisaje a nuestros pies. El recuerdo de los grandes campeones de rally atacando esta traicionera carretera a lo largo de las décadas le otorga un plus de interés para ser visitada.

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