Alfa Romeo 164 Procar, la berlina con motor de F1
A finales de los años 80 se vivió en el automovilismo una de las épocas con mayor libertad creativa. Prohibidas las normativas del Grupo B de rallyes debido a su peligrosidad, y con la Fórmula 1 a las puertas de un cambio irreversible con la paulatina llegada de la tecnología, fueron muchos los fabricantes que se animaron a desarrollar prototipos con grandes aspiraciones.
Este fue el caso del proyecto que dio lugar al Alfa Romeo 164 Procar.
Dos fueron los motivos que propiciaron el nacimiento de uno de los coches de competición más apasionantes de la historia. Por un lado, la Fórmula 1 puso sobre la mesa la alocada propuesta de crear el ProCar, un campeonato de soporte en el que se dieran cita vehículos tipo “silueta”, chasis de competición unidos a carrocerías de coches convencionales… ¡y motor de F1!
Y por otra parte, Alfa Romeo acababa de ser adquirida por el Grupo Fiat, que paralizó su participación en la categoría reina del automovilismo para no propiciar un duelo entre Alfa Romeo y Ferrari. Como resultado de este panorama, la marca de Milán se encontró con un brillante motor atmosférico V10 recién desarrollado al que no podría sacar partido en la Fórmula 1. Así que se dio vía libre a los diseñadores para crear un prototipo de coche con aspecto de turismo equipado con dicho motor. Y el Alfa Romeo 164 fue el elegido.
En la creación del Alfa Romeo 164 Procar se contó con la escudería británica Brabham para el desarrollo de un chasis monocasco de fibra de carbono, al que se incorporó el propulsor V10 en posición central trasera, suspensiones con esquema de varillas de empuje y se cubrió con una carrocería de fibra de vidrio que adoptaba las formas del Alfa Romeo 164, la nueva berlina prestacional de la marca.
El resultado era espectacular a nivel mecánico, y a su vez era muy sobrio estéticamente, sin apenas diferencias respecto a un 164 convencional. Se dice que dos chasis fueron construidos de este prototipo, al que el piloto italiano Ricardo Patrese estrenó en un escenario inmejorable: el Gran Premio de Italia de 1988, celebrado en el Circuito de Monza.
Dos vueltas rápidas fueron suficientes para dejar boquiabiertos a los presentes, que veían como un coche “de calle” hacía rugir su motor V10 en las largas rectas del Templo de la Velocidad, alcanzando los 329 km/h de velocidad máxima.
Aquella puesta de largo del modelo sería, a la postre, su única demostración en público.
Estos son los datos técnicos que se atribuyen al Alfa Romeo 164 Procar:
- Motor: Alfa Romeo V1035
- Cilindrada: 3.500 cc
- Potencia: 620 CV a 13.300 rpm
- Aceleración 0-100 km/h: 2,1 segundos
- Velocidad máxima: 330 km/h
- Peso aproximado: 750 kg.
El resto de la historia de este modelo es bastante corta, pues la F1 no mantuvo el interés en la categoría ProCar y por lo tanto, otros fabricantes no quisieron invertir recursos en un nuevo programa deportivo. Eso sí, el proyecto sirvió de semilla para el idilio que mantuvieron las carreras de turismos con Alfa Romeo, que durante la década de los 90 lograría importantes éxitos en los campeonatos europeos más prestigiosos.
