La conducción autónoma, a debate

Conduccion autonoma 5

El conjunto de tecnologías que permiten que un automóvil sea capaz de controlar ciertos parámetros durante su circulación es lo que llamamos conducción autónoma. Con la constante implementación de nuevos avances en la industria del automóvil, cada vez es más factible pensar en un futuro donde los coches se desplacen sin necesidad de ser controlados por personas.

Pero esta evolución cuenta con tantos partidarios como detractores. Así, la conducción autónoma es un tema polémico que abre un debate sobre hasta qué punto permitir que los coches sean los encargados de autogestionarse en el tráfico es un avance para la sociedad, o por el contrario un paso atrás debido a los problemas que puede generar.

 

Las 4 fases de la conducción autónoma

Para empezar, debemos entender que según la National Highway Traffic Safety Administration (NHTSA), la conducción autónoma se divide en 4 fases, en función del grado de autonomía que tome el automóvil por encima del conductor:

  • Fase 0: el conductor se encarga de todos los aspectos de la conducción.
  • Fase 1: el vehículo tiene controles individuales automáticos, tales como el control de crucero o el freno autónomo de emergencia.
  • Fase 2: el vehículo cuenta con dos controles automáticos actuando a mismo tiempo, por ejemplo, el control de crucero y el control de mantenimiento en el carril.
  • Fase 3: el coche puede circular por sí solo, pero requiere de un conductor prestando atención y capaz de reaccionar a demandas que pueda realizar el vehículo.
  • Fase 4: el automóvil circula por sí solo sin ayuda de un conductor, una vez se le ha indicado el punto de destino.

Actualmente un coche sin sistemas de ayuda a la conducción estaría en la fase 0, mientras que la gran mayoría de coches comercializados en los últimos años oscilan entre la fase 1 y la fase 2.

A partir de aquí, los fabricantes de automóviles tienen un reto muy importante: cómo realizar la evolución desde los niveles inferiores hasta la fase 4. Las estrategias son muy dispares, pues mientras marcas como Mercedes-Benz proponen ir subiendo paulatinamente el nivel de controles automáticos realizados por el vehículo, otras firmas como Google apuestan por que el primer coche que comercialicen sea autónomo al 100%.

Xavier Roca, asesor comercial de los concesionarios oficiales Cars Barcelona, nos explica que “marcas como Mercedes-Benz están apostando con mucha fuerza por la conducción autónoma. Por ejemplo, el nuevo Clase E, que equipa tecnologías avanzadas como la conducción pilotada y el sistema de giro en adelantamiento, nos acercan cada vez más a un futuro donde se facilitará al máximo la conducción."

Conduccion autonoma 4

 

¿Qué camino debe seguir la conducción autónoma?

Las miles de horas de conducción autónoma que acumulan los primeros prototipos arrojan muchos datos que definen los pros y contras de esta evolución.

Así, un coche de conducción autónoma total (fase 4) únicamente depende de sí mismo a la hora de tomar las decisiones en un escenario de circulación real. A partir de sus múltiples sensores y en base a las informaciones que recibe desde los servidores (mapas, tráfico, peajes, etc.) actúa en consecuencia y previene los peligros sin necesitar ayuda por parte del conductor. Mientras más mejore la tecnología, más “sencillo” acabará siendo que un coche pueda ser totalmente autónomo.

Por otra parte, un automóvil de fase 2 o especialmente 3, se enfrenta a un problema de difícil solución: realiza la mayor parte de operaciones durante la conducción, pero puntualmente debe solicitar asistencia al conductor para que este realice una maniobra evasiva, decida qué ruta prefiere tomar o controle cuándo realizar un cambio de dirección.

Lamentablemente, la conducta humana tiende a disminuir su nivel de prudencia cuando se encuentra en un entorno que le genera confianza. A la práctica, esto significa que es probable que cuando el coche requiera de la asistencia humana, esta no responda según lo necesario.

Conduccion autonoma 3

 

¿Qué debe mejorar para que la conducción autónoma sea posible?

El primer escollo con el que se encuentra la conducción autónoma es que las legislaciones vigentes aún no están preparadas para este cambio de paradigma, lo que significa que se requieren mejoras legales ya no solo para permitir que un coche circule sin conductor, también para determinar quién se hace responsable en caso de accidente.

En todo caso, para que esta conducción siga evolucionando también se requieren infraestructuras adecuadas, tanto a nivel de adaptar las vías de circulación, como otros aspectos como la plena conectividad del coche a la red, pues de esta dependerá que el vehículo se pueda conectar a los servidores de mapas, de informaciones de tráfico y también para interactuar con el resto de vehículos de la vía.

Conduccion autonoma 1

 

¿Dónde nos encontramos actualmente?

El escenario actual plantea que cada vez sea más común que los coches nuevos incorporen parte de los sistemas de ayuda a la conducción que nos dirigen cada vez más a la plena autonomía del vehículo. Esto incluye:

  • Control de velocidad de crucero
  • Sensor de colisión frontal
  • Asistente de maniobra evasiva
  • Sensor de ángulo muerto
  • Asistente de aparcamiento

A partir de aquí, las evoluciones en los próximos años nos permitirán determinar hacia donde se dirige el sector, bien sea hacia una circulación plenamente autónoma, o a una conducción en la que el conductor siga siendo indispensable. En todo caso, estudios realizados por algunos de los principales fabricantes de automóviles autónomos y eléctricos indican que “los coches conducirán solos, pero no antes del año 2030”. 

Conduccion autonoma 2

Os invitamos a visitar los concesionarios oficiales QUADIS para descubrir los coches que ya equipan los mejores sistemas de ayuda a la conducción.