La cuarta generación del Honda CR-V ya es una realidad. El SUV de la marca japonesa, uno de los referentes de su gama de vehículos actual, se ha renovado en 2013 para seguir ofreciendo todo lo que los conductores buscan en él, un buen comportamiento en todos los terrenos y la incorporación de un motor tan innovador como el diésel1.6 i-DTEC.
Si el Honda CR-V ha resistido más de 15 años en el mercado vendiendo más de 2,5 millones de unidades es básicamente porque logra aunar todos los aspectos que demanda el comprador de un buen SUV (todocamino): diseño atractivo con apariencia de 4x4, comodidad y espacio suficiente para cinco adultos, buen comportamiento dinámica y un precio ajustado. Además, es el primer modelo de la gama que permite elegir entre tracción delantera o tracción a las cuatro ruedas.
Porque con su elegante y sorprendente diseño, el CR-V ofrece una experiencia de conducción excepcional tanto si se circula cómodamente por ciudad o si se realiza un viaje por cualquier terreno. El vehículo japonés ofrece en todo momento el espacio, rendimiento y confort que sus ocupantes necesitan.
El renovado diseño del CR-V sorprende por sus líneas suaves y fluidas, combinando un nuevo estilo de paragolpes y faros. Esta imagen dinámica y atractiva se traslada hasta la parte trasera del automóvil, donde se mantienen los pilotos traseros verticales, ahora con un estilo más moderno. Sus luces incorporan tecnología LED (la misma que las luces diurnas delanteras), especificaciones exclusivas desarrolladas por Honda para el mercado europeo, pese a que el CR-V ha sido diseñado como un automóvil global.
A nivel de seguridad es difícil encontrar un vehículo mejor que el CR-V. El todocamino cuenta con la máxima calificación en los tests de choque Euro NCAP (cinco estrellas) desde el año 2009, compartiendo dicha calificación con el resto de la gama Honda.
Pero al CR-V le hacía falta renovar la gama de motorizaciones, así que desde ahora puede equipar un motor tan revolucionario como el 1.6 i-DTEC, del que hablamos hace unos meses en el blog.
De manera resumida, este motor turbodiésel es capaz de entregar 120CV a 4000 rpm, logrados gracias a una considerable reducción de la fricción mecánica entre los elementos del motor al optimizar cilindros, bielas y paredes cilíndricas para aligerar todo el conjunto, dando como resultado una disminución del 40% en pérdidas de energía por fricción respecto a su predecesor, el motor 2.2 i-DTEC.
El fabricante nipón ha primado el equilibrio entre la eficiencia medioambiental y el punto de conducción dinámica y divertida que siempre ha caracterizado a sus vehículos, siguiendo el camino marcado por su Earth Dreams Technology.
Porque los tiempos han cambiado, y si hace una década (en plena ebullición del concepto SUV) se buscaban motores de gran cilindrada y que contaban los caballos por centenares, la situación actual requiere de motores mucho más optimizados y eficientes. Y es que aunque pueda parecer una broma, el Honda CR-V equipado con este motor homologa un consumo medio de 4,5 litros y unas emisiones de CO2 de 119 g/km. Según Honda, con el nuevo CR-V 1.6 i-DTEC se pueden recorrer unos 1.300 km sin repostar. Quién diría que un SUV podía consumir lo mismo que un pequeño utilitario, ¿verdad?
Según los datos definitivos, el CR-V con esta mecánica (asociado únicamente a tracción delantera) alcanza los 183 km/h de velocidad máxima y acelera de 0 a 100 km/h en 11,3 segundos. El cambio elegido es el manual de seis velocidades y siempre equipado con el sistema Stop&Start. Este motor equipado en el SUV mediano destaca por ser refinado y extremadamente suave, ofreciendo una potencia correcta desde bajas revoluciones.
Disponible en los acabados Comfort, Elegance y Lifestyle, llegará en las próximas semanas con un precio alrededor de los 27.000 euros. El equipamiento básico incluye llantas de 17 pulgadas, control de crucero, climatizador dual o pantalla táctil.
Y si buscáis una motorización de mayor cilindrada, Honda pone a disposición de los clientes el conocido motor diésel 2.2 i-DTEC así como el 2.0 i-VTEC de gasolina.
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