Los años 80 fueron una época fascinante para el mundo del automóvil. En la década de los mejores compactos deportivos y de las berlinas de lujo de altas prestaciones, el Grupo Fiat decidió que era el momento de diseñar un automóvil capaz de plantar cara a las rápidas berlinas alemanas.
El objetivo era ambicioso y se decidió contar con el Lancia Thema como el automóvil perfecto para la causa. El Thema era una berlina ejecutiva de 4,6 metros de longitud que compartía base con el Alfa Romeo 164 y el Fiat Croma e inició su comercialización en 1985. Pero sus motores de 2 y 2.8 litros gasolina y 2.5 diésel no eran suficientes para aprovechar al máximo un buen chasis como el del Thema.
Así que se aprovecharon las sinergias del grupo y, de un día para otro, los ingenieros de Lancia se encontraron en su taller con una sorpresa muy positiva: Ferrari autorizaba a usar el motor V8 2.9 litros del Ferrari 308 y el Mondial Quattrovalvole para crear una edición muy especial del Thema.
Bajo la denominación de Lancia Thema 8.32 (donde el 8 correspondía al número de cilindros y 32 al número de válvulas) nacía una de las berlinas más rápidas de su época, aunque debido a las propias especificidades de los coches de tracción delantera, la potencia fue suavizada respecto al propulsor original.
215 CV de potencia a 6.750 rpm para un par motor máximo de 285 Nm fueron el resultado de modificar el cigüeñal y las válvulas del motor Ferrari, que destacaba perfectamente en cuanto se abría el gran capó del Thema.
El modelo ofrecía unas muy buenas prestaciones, tales como una aceleración de 0 a 100 km/h en 6.8 segundos y una velocidad máxima de 240 km/h. Y a diferencia de los estándares del momento, que empezaban a imponer las cajas de cambio automáticas en los coches de gama alta, el Thema 8.32 sólo estaba disponible con una caja manual de 5 velocidades. ¡Un placer para el conductor!
Además, el modelo ofrecía aquello que tanto ha gustado siempre de las berlinas ejecutivas: una buena potencia en un automóvil discreto. Únicamente los más expertos podían averiguar, gracias a sus llantas exclusivas de 15 pulgadas y al alerón retráctil, que se trataba del Thema 8.32 y no de una versión convencional del vehículo. Este alerón se desplegaba automáticamente a partir de los 140 km/h ofreciendo un aspecto soberbio a la berlina italiana.
En aquellos años el Lancia Thema 8.32 era uno de los coches de tracción delantera más potentes del mercado, y sin duda el más especial gracias a contar con el inconfundible sonido V8 de origen Ferrari en su interior.
Este modelo nunca fue fabricado para ser un éxito de ventas. Su adquisición debía ser limitada y por ello quien quería adquirir un Lancia Thema 8.32 en España debía estar dispuesto a pagar 7 millones y medio de pesetas. Pero el coste venía acompañado del lujo mayúsculo que se respiraba en su interior, con saplicadero de madera y asientos y volante forrados en cuero por artesanos de la prestigiosa firma Poltrona Frau. El climatizador bizona, la suspensión adaptativa o los asientos calefactados daban al modelo un confort y una tecnología imposible de alcanzar por algunos de sus rivales. Este modelo estuvo en fabricación varios años, desde 1986 hasta 1991, y se fabricaron aproximadamente 3.500 unidades.
El heredero del Thema sería el Lancia Kappa, un coche más racional que no pudo alcanzar el gran carisma que logró el Lancia Thema 8.32, toda una rareza del mercado cuyo sucesor espiritual es el nuevo Alfa Romeo Giulia, la actual berlina de la marca italiana que en su versión más radical se alza hasta los 510 CV con un bloque motor V6 desarrollado nuevamente por la marca de Maranello.
