Mercedes-Benz EQ Silver Arrow, la flecha de plata del futuro
En el prestigoso evento Monterey Car Week, celebrado hace solo unos días en la conocida ciudad californiana, los fabricantes de automóviles han tenido más protagonismo que nunca gracias a la presentación de prototipos a medio camino entre las tecnologías futuristas y el recuerdo de los coches más gloriosos.
Acaparando todas las miradas, el Mercedes-Benz EQ Silver Arrow se ha mostrado por primera vez en público sorprendiendo por un retrofuturismo elevado a la máxima expresión. Los más expertos en el mundo de la competición notarán que el EQ Silver Arrow tiene una clara inspiración en las míticas flechas de plata de Mercedes-Benz, aquellos bólidos con los que pilotos como Rudolf Caracciola alcanzaron asombrosos triunfos y récords durante los años 30.
Aquellos automóviles excepcionales se desarrollaron en colaboración con los principales ingenieros aeronáuticos del momento, alcanzando nuevos hitos en materia de eficiencia aerodinámica y estabilidad. Los túneles de viento son herederos de aquel legado, y también lo son los materiales como la fibra de carbono, usada para definir la carrocería del vehículo.
En consecuencia, este prototipo es un ejercicio de diseño que toma prestados los avances de décadas pasadas, pero que mira al futuro de la mano de las tecnologías que aplicarán los futuros modelos de la gama Mercedes-Benz EQ.
Equipado con un propulsor 100% eléctrico con una potencia de 550 kW (750 CV), el modelo se acompaña de una batería de 80 kWh, ofreciendo una autonomía estimada de 400 kilómetros según el ciclo de homologación WLTP.
Siguiendo las bases sobre las que se estructuran los modelos Mercedes-Benz EQ, este concept car no podía dejar de lado avances como un puesto de conducción eminentemente digital mediante pantallas táctiles panorámicas y retroproyecciones. Gorden Wagener, jefe de diseño de Daimler AG, explica que “el showcar EQ Silver Arrow enlaza con la tradición de las flechas de plata. Este vehículo encarna el concepto de lujo avanzado y presenta un anticipo del futuro de nuestro diseño. De ese modo, el showcar se convierte en la máxima expresión del lenguaje formal de nuestra nueva marca de productos y tecnología EQ”.
De apariencia espectacular, el modelo destaca por su gran longitud (5,30 metros) y sus enormes superficies lisas, algo que cobra especial protagonismo al haberse incorporado la pintura Alubeam patentada por Mercedes-Benz. Este compuesto multicapa en plata genera la sensación de tratarse de un metal líquido que fluctúa entre el frío y el calor. El modelo monta unas espectaculares llantas de 168 radios cada una, con un tamaño de 24 pulgadas delante y 26 pulgadas detrás, complementadas por la curiosa solución de los tapacubos estáticos y cubiertas parciales. El splitter trasero heredado directamente de la Formula 1, sus estilizadas luces frontales y traseras o el minúsculo pero funcional parabrisas cierran un apartado estético sublime.
El Mercedes-Benz EQ Silver Arrow es un show car que no llegará al mercado, pero que sirve para confirmar que la marca de Stuttgart está iniciando una apasionante senda mediante la gama Mercedes-Benz EQ, en la que diseño, tradición e innovación se darán la mano para crear automóviles destinados a marcar la evolución de la industria durante la próxima década.
